lunes, 18 de octubre de 2010

Un lunes

El despertador ha sonado a las 7.30 pero, era de esperar que lo retrasaría 10 min y una hora si hubiese podido. No podia perder mucho tiempo, porque, al haber estado el finde fuera tenia muchas cosa pendientes. Así que, después de mi ducha vespertina me he puesto ha hacer tareas hogareñas: lavar sabanas, recoger ropa tendida, preparar el taper de la comida, algo de orden-limpieza por el cuarto y a la calle a la carrera a por el metro.

La verdad es que he ido como un cohete, aunque no se muy bien porque, aunque puede que afectara estar un poco desorientado después de tantos días fuera de casa y creer que llegaba tarde, por lo tanto me he echado unas carreritas para coger el metro y luego para llegar al trabajo, para luego darme cuenta que he regalado 10 min de mi sueño al trabajo.. bueno, ya los recuperare.

El curro ha sido pesadito hoy. Por la mañana me moría y mientras veía que el día seria muy largo y no se si era a mi que me costaba darle al enter o el ordenador que se lo pensaba mucho. Gracias a Dios, pasado medio día la cosa se ha activado y cada vez el tiempo iba más deprisa, eso si, he seguido regalando tiempo a la empresa con la comida porque 15 min no es parar para comer, pero estos si que los he recuperado al final de la tarde con una xerredeta con el compañero sobre las similitudes y diferencias de la gestión del fútbol entre nuestro países.. como une el deporte a los hombres (que les debe unir a las mujeres..?)

Por fin libre y pensaba que me iba directo a la cama, pero no! un lunes y sin comida en casa puede convertirse en una semana nefasta, así que directos al supermercado a hacer la compra grande de (1, 2 o.. 3?) semana. Pero como creo que yo no era el único que marcaba un ritmo lento, he tenido que esperar al conculino para ir al supermercado. El tío iba en bus dirección a el, yo pasaba por una parada en la misma dirección, así que la idea era subirme a ese bus.. no ha sido el bueno ni el primero, ni el segundo.. el cuarto.

Con un hambre que me moría he llegado a casa, he dejado la compra y me he puesto a hacer la cena: una merlucita a la plancha con un toque de hiervas acompañado de unas patatas y zanahorias en su toque, mmm. La idea es que lo que cocino por la noche sirva de cena y de comida.. pero no ha sido posible y he acabado por comerme el plato entero. ¿Y mañana que?, pues a cocinar otra vez algo ya mas sencillo, porque estaba de cocina hasta.. he limpiado hasta los mecheros que tenemos tirados por ahí.. y me ha dado mal rollo, se ve que aun no he superado los primeros días de la americana.

Ahora por fin he llegado al cuarto, después de 14 horas pululando por el mundo, un poco de Internet y a la cama, que mañana es martes.

Buenas noches

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